viernes, 22 de mayo de 2020
jueves, 21 de mayo de 2020
miércoles, 20 de mayo de 2020
miércoles, 13 de mayo de 2020
lunes, 11 de mayo de 2020
viernes, 8 de mayo de 2020
jueves, 7 de mayo de 2020
LA LIEBRE Y LA TORTUGA
Un día la liebre se acercó a la tortuga y le dijo:
– Hola, tortuga. ¿Qué
tal si echamos una carrera? Seguro que te gano.
La tortuga le dijo:
– Vale.
Cuando empezaron la carrera la liebre se quedó en un árbol
tan tranquila, y se durmió. La tortuga se animó a si misma porque ella creía
que podía hacerlo. Pasaron unos minutos y la liebre se despertó y se fue a otro
árbol, y se subió a él; los espectadores animaban a la tortuga.
Pasado un rato la liebre le preguntó a los espectadores:
- ¿¿ Qué tal estáis??
Los espectadores no supieron que decir, así que no dijeron
nada.
Mientras que la liebre estaba entretenida con los espectadores
la tortuga aprovechó y se dio prisa para llegar a la meta. Unos minutos después
la tortuga dijo en alto:
- ¡¡¡¡¡ GANE!!!!!
Y la liebre dijo impresionada:
- ¿¿¿¿ Cómo????
MORALEJA
Con CONSTANCIA se consiguen todas las cosas.
miércoles, 6 de mayo de 2020
KA, LA SERPIENTE MALHUMORADA.
En la Selva
Amazónica viven todo tipo de animales e insectos, pero en esta historia sólo
van a aparecer 5 animales: la cabra Amanda, el loro Pepe, la liebre Lili, el toro
Fernando y Ka, la serpiente de cascabel.
Era un día
soleado, húmedo y muy caluroso. Los animales estaban bañándose en un río
cercano a su casa. Entonces, llegó Lili.
-Hola chicos
¿qué tal? – dijo Lili muy animada, dirigiéndose al grupo que formaban Pepe,
Fernando y Amanda.
-Hola Lili,
nosotros bien y ¿tú? –dijo Pepe, también mostrándose muy contento.
-Yo estoy
genial -Dijo Lili y añadió- Podríamos hacer hoy una excursión e irnos hasta
donde viven los orangutanes. Hace mucho que no los vemos. Quizás hayan nacido
las crías de orangutanes y serán muy monos.
-¡Qué idea
más chula! -Dijeron casi todos al unísono.
La única que
se quedó callada y pensativa fue Amanda.
-¿Y a ti qué
te parece Amanda? ¿No quieres acompañarnos? -Preguntó Fernando.
-Tengo miedo
de encontrarnos con Ka. La última vez le gané jugando a las cartas y me mordió -Contestó
Amanda.
- Yo tampoco
quiero encontrarme con ella.- dijo Fernando. Y añadió- estábamos jugando al pilla-pilla y al
acercarme a ella, se dio la vuelta y me mordió una pata.
- Venga
chicos que seguro que no pasa nada. – dijo Lili animando al grupo.
Todos se
pusieron en marcha. Cuando llevaban ya una hora de paseo y estaban a punto de
llegar a su destino se encontraron con Ka. Ella saludo e insistió en unirse al
grupo pero ellos no querían por los incidentes ocurridos días atrás. Entonces le
dijeron:
-Como últimamente nos has mordido ya no
queremos estar más contigo. No eres buena amiga. Si empiezas a cambiar y vemos
que eres de fiar igual la próxima vez contamos contigo.
Entonces Ka
saltó con furia hacia Lili para morderla y en ese momento el grupo estaba tan
enfadado que le quitó la oportunidad de volver a estar con ellos.
MORALEJA: Tienes
que tratar bien a los demás para que los demás te traten bien y también para no
hacer sentir mal a nadie.

EL PERRO Y SUS AMIGOS
por Lorenzo Torres Reyes
Había una vez un perro que era muy tímido y no le gustaba trabajar con nadie.
Donde él vivía era en una casa muy pequeña donde había un descampado muy grande y muy chulo. En este descampado es donde jugaban el perro y sus amigos.
Su madre siempre le ponía cosas que hacer, como por ejemplo: estudiar, limpiar la casa, hacer su cama...y no podía salir al descampado a jugar hasta que terminaba todas estas tareas.
Sus amigos estaban intentando ayudarle a hacer las cosas que le ponía su madre y hacer sus recados pero el perro no quería que le ayudaran.
Un día su amigo dijo:
-Si te ayudo acabarás antes.
Y el perro respondió:
-No, no necesito ayuda. Ya lo hago solo.
Así el perro tenía poco tiempo para jugar y cuando podía jugar sus amigos no estaban.
Pasaron unos días y el perro se seguía negando, hasta que llegó un día que no sabía qué hacer. Entonces les pidió ayuda a sus amigos pero sus amigos no le ayudaron.
Había una vez un perro que era muy tímido y no le gustaba trabajar con nadie.
Donde él vivía era en una casa muy pequeña donde había un descampado muy grande y muy chulo. En este descampado es donde jugaban el perro y sus amigos.
Su madre siempre le ponía cosas que hacer, como por ejemplo: estudiar, limpiar la casa, hacer su cama...y no podía salir al descampado a jugar hasta que terminaba todas estas tareas.
Sus amigos estaban intentando ayudarle a hacer las cosas que le ponía su madre y hacer sus recados pero el perro no quería que le ayudaran.
Un día su amigo dijo:
-Si te ayudo acabarás antes.
Y el perro respondió:
-No, no necesito ayuda. Ya lo hago solo.
Así el perro tenía poco tiempo para jugar y cuando podía jugar sus amigos no estaban.
Pasaron unos días y el perro se seguía negando, hasta que llegó un día que no sabía qué hacer. Entonces les pidió ayuda a sus amigos pero sus amigos no le ayudaron.

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